Soñábamos
con ser futbolistas y algún día marcar el gol de la victoria en una
final, con ser bailarinas, con ayudar a los niños pobres de África
o con ser cirujanos sin pararnos a pensar que nos daba pánico la
sangre.
Ahora, casi 30 años más tarde , ya no soñamos porque ni siquiera dormimos, sino que vivimos, y los mejores sueños se están convirtiendo en los momentos despiertos que pasamos juntos.
Ahora, casi 30 años más tarde , ya no soñamos porque ni siquiera dormimos, sino que vivimos, y los mejores sueños se están convirtiendo en los momentos despiertos que pasamos juntos.
No comments:
Post a Comment